viernes, 28 de octubre de 2011

EL VENDEDOR AMBULANTE DE NARANJAS

El vendedor de naranjas en una auca del siglo XVIII de vendedores ambulantes de Barcelona. ("Costumari" de Joan Amades)

A inicios de noviembre empezaban a llegar las primeras naranjas de Valencia. En todas las poblaciones de la costa donde era fácil atracar, se desplazaban barcas de vela cargadas de naranjas, que se amontonaban en la playa. Las vendían desde un real o dos al cien, según la calidad y el año. Gente de Valencia vestida con “saragüells” y “jupetí”, se desplazaba por nuestros pueblos para vender naranjas por la calle.

Vendedor de naranjas en una auca de vendedores ambulantes del segundo tercio del siglo XIX
("Costumari" de Joan Amades)


La mayoría las transportaban en grandes cestos de caña. También había vendedores con carretones planos. Solían pregonar las naranjas con una típica cancioncita. Entre las muchas que se utilizaban destaca aquella que decía: "¡Chinas y cañadú, las llevo!"



El vendedor de naranjas según un romance de inicios del siglo XIX
("Costumari" de Joan Amades)







jueves, 27 de octubre de 2011

INAUGURACIÓN DE UN EMBARCADERO DE NARANJAS EN LA PLAYA DE ALMAZORA EN EL AÑO 1879

En el periódico digital larodalia.es se publicaba un reportaje histórico de mucho interés, en el cual se describía la importancia de la creación de un nuevo servicio de embarque de naranjas para transportarlas por mar. A finales del siglo XIX, concretamente el lunes 14 de abril de 1879 la playa de Almazora se lleno de vecinos de esta localidad y de otras poblaciones de los alrededores. Almazorinos i forasteros no quisieron perderse la inauguración de un nuevo servicio de embarque. La nueva actividad abría perspectivas de futuro a los comerciantes y propietarios que consiguieron un acceso directo de sus almacenes hasta los barcos que transportaban la naranja al extranjero:

"Los vapores Cervantes y Colón fueron las primeras naves que llenaron sus bodegas de naranjas de Almazora para la exportación. El periódico El Siglo Futuro contaba así la noticia en su edición del sábado 19 de abril de 1879:

"El lunes se verificó en la importante población de Almazora la inauguración oficial del embarque de la naranja en la playa recientemente habilitada para embarcadero de las frutas de aquel país, cuyo acto; que revistió gran solemnidad, ha llenado de alegría a los vecinos de Almazora, que en número de 4.000 se trasladaron a la playa, distante cinco kilómetros, con el ayuntamiento, clero, autoridades provinciales y de marina, que presidían la fiesta, y gran número de convidados de Castellón y pueblos circunvecinos. En el eremitorio de San Antonio se celebró una Misa, a la que asistieron los convidados y una gran muchedumbre del pueblo”

Antigua etiqueta de naranjas dirigidas a la exportación

“A las nueve de la mañana, la siempre solitaria playa de Almazora parecía un extenso campamento: dos magníficos vapores empavesados, el Cervantes y el Colón, de la matrícula de Barcelona, se distinguían a bien corta distancia, esperando recibir en sus extensas bodegas el dorado fruto, que a su vez era conducido desde los almacenes del pueblo, en adornados carros de verde follaje y bandoleras”

"Al llegar a la playa las autoridades fueron recibidas por la bien dirigida música de Burriana, que les saludó con un pasodoble, rompiendo con otro la no menos inteligente de Almazora; y estos acordes, y los hurras de la multitud y el ruido de centenares de morteretes y tracas disparadas, causaban en el ánimo un entusiasmo indescriptible”

"El elemento oficial, clero y convidados fueron hospedados en la casa cuartel de carabineros. Fue leída el acta de inauguración por el secretario del ayuntamiento, y acto seguido la real orden de concesión por el alcalde D. Jaime Pezudo.

"Seguidamente el ayuntamiento y demás autoridades se trasladaron al sitio de embarque y fueron botadas al agua muchas lanchas preparadas y cargadas con cajas de naranja, que en medio del griterío de la multitud se deslizaron hacia el Cervantes i el Colón, con lo que terminó el ceremonial de oficio”

"La humanidad desvalida, que nunca falta en pueblos de crecido vecindario como Almazora, no fue olvidada por su ayuntamiento, que les preparó ocho grandes y bien condimentados calderos con arroz y abundante carne, que fueron equitativamente distribuidos entre los pobres al son de las músicas y en presencia de las autoridades y numeroso concurso: este se desparramó luego para saborear suculentas paellas por aquellos amenos contornos”


Nos permitimos instar la atención de nuestros lectores en unos protagonistas que permitieron el inicio de esta etapa de oro de la economía de la naranja. Nos estamos refiriendo a los vapores que curiosamente eran propiedad de navieras inglesas aunque navegaran bajo pabellón español. El caso de los vapores Cervantes y Colón, no son ninguna excepción. Tal y como se relata en vidamaritima.com:


"El uso de testaferros por las todopoderosas navieras inglesas de los siglos XIX y XX era común en nuestro Estado, y, dadas las circunstancias, enriquecía y desarrollaba el intenso comercio con el Imperio británico, en el que por aquellas fechas no se ponía el sol. Eran, en realidad, empresas inglesas que burlaban de esta manera la legislación española que establecía el derecho preferencial a las mercancías navegando bajo pabellón nacional, quedando estas desgravadas en sus aranceles de importación.

Un famoso testaferro que represento intereses británicos fue Manuel Acebal Laviada, quien estableció lazos comerciales con la naviera McAndrew. A la muerte de Manuel Acebal en 1.850, su viuda e hijos forman Viuda de Acebal e Hijos y finalmente en 1.866 Serapio Acebal y Compañía. De esta primera época son los vapores Cervantes (ex-Acor) y Colón (1º)

El vapor Colón atracado en Tarragona a inicios del siglo XX
(Foto:www.vidamaritima.com)

El Colón fue botado el 30 de Septiembre de 1.871 y construido en los astilleros de Salcombe por Bowdler & Chaffer. De tres mástiles en ligera caída, puente central abierto y chimenea a popa, tenia 190 pies de eslora entre perpendiculares; manga de 28,2 pies y puntal a la cubierta alta de 17 pies. Casco de hierro, 1 eje de propulsión acoplado a una maquina Compound de 80 caballos nominales, de dos cilindros de diámetro 23 y 46 pulgadas respectivamente, para una carrera de 24 pulgadas. De 742 toneladas de peso muerto y 509 toneladas de registro bruto. En 1874 se transfiere a la naviera de J. Roca y Compañía. En 1925 figura a nombre de P. Garcias Segui, y a finales de ese mismo año es desguazado.


El vapor Colón (Foto:Postal de la época)

En 1.857 el vapor Acor, propiedad también de la naviera McAndrew, de 315 toneladas de registro bruto, se convierte en el primer buque de la compañía. Este buque se transfiere a la bandera española con el nombre de Cervantes.”

El Vapor "Colón" (Foto:www.vidamaritima.com)






jueves, 20 de octubre de 2011

LOS PRIMEROS VAPORES NARANJEROS EN BURRIANA



Guillem Ríos, publicaba en elperiodic.com , el periódico digital de la Comunidad Valenciana, un interesante articulo, en el cual se describían, entre otros temas, los primeros años de las exportaciones de naranjas des del puerto de Burriana:


(Fotografia:www.elperiodic.com)


(Fotografia:www.elperiodic.com)

"Desde los inciertos comienzos, con las exportaciones desde el Grao al sur de Francia, en la primera mitad del siglo XIX, con aquellos pequeños “llauts” gobernados por los mercaderes mallorquines de Sóller, Burriana alcanzará la plena hegemonía a partir de 1870, cuando el Reino Unido pasará a ser nuestro principal cliente con la llegada de los primeros vapores.


Un acontecimiento recreado por Vicent Abad, en su novela “El Jardín de las Hespérides” – de obligada lectura para quien desee revivir esta época hegemónica de Burriana –, que algunos sitúan como el origen de la expresión popular Burriana, París y Londres. Narra el director de nuestro Museu de la Taronja que: “Ocurrió el invierno de 1870, en un día frío y brumoso como aquél, con los almacenes trabajando a pleno rendimiento y la playa llena de veleros. Todo funcionaba con normalidad hasta que, de improviso, del mar llegó un enorme mugido, un largo y penetrante lamento que hacía vibrar la niebla y que nunca nadie había escuchado hasta entonces. Al oírlo, la gente de la playa quedó paralizada y las mujeres de los almacenes abandonaron su trabajo agolpándose nerviosas a las puertas de los mismos. – ¿Qué ocurre? ¿Qué ha sido eso? – gritaban excitadas mientras se aproximaban temerosas a la playa. (…) Solamente los marineros de los « llauts » permanecieron en sus puestos, contemplando divertidos la escena que había dejado la playa desierta y sembrada de naranjas. - ¡Malditos destripaterrones! – exclamó un marinero –. ¡Salid de vuestros escondites! No es más que un vapor. (…) Todas las miradas se volvieron de nuevo hacia el buque del que comenzó a descender una chalupa en cuyo interior se adivinaban varias figuras humanas (…) Uno de ellos vestía uniforme azul marino con barras doradas en la bocamanga y cubría su cabeza con una gorra en cuyo frente destacaba un escudo hecho asimismo de bordado de oro; el otro, un paisano, llevaba un largo sobretodo y sostenía entre sus dientes una voluminosa pipa de la que salía humo azulado. Al llegar a la orilla desembarcaron y este último se dirigió al comerciante Bautista Cantos diciéndole: - Señor Cantos, tengo el gusto de presentarle a Mister Miles, Capitán del  « S.S. OBERON » de la Marina de Su Majestad Británica”.

"...Para el atraque del primer barco en el Puerto, hubo que esperar hasta 1934. Hasta entonces fue cotidiana la imagen de aquellas barcazas en el Grao, repletas de cajas, que tenaces trabajadores, con el agua casi hasta el cuello, empujaban mar adentro, y cuando no, conducían a hombros las cajas hasta las barcazas, luchando contra la fuerza de las olas. Un periodo descrito por el premio Pulitzer, James Michener, en su libro Iberia, publicado en 1968, en el que el norteamericano narraba su primera llegada a España en 1932, cuando tenía 25 años, en un vapor inglés que venía al Grao a cargar naranjas: “El primer español que vi en mi vida fue un trabajador de Burriana, sin más ropa que un culero, que nadaba hacia mi con la mano derecha asida a un cuerno de toro…


Sus brazos eran como los de los hombres prehistóricos, y para él yo era un chaval. Sus bueyes eran distintos a todos los que yo había visto hasta entonces, y juntos me llevaron hacia la orilla de España. Cuando vi bien de cerca llevar las lanchas al agua, quedé sorprendido al comprobar la energía que ello requería. Era medieval, o peor aún. Era un desperdicio de fuerza que me resultaba incomprensible, y aquello continuaba el día entero y el año entero, hombres y animales trabajando hasta matarse. Pero los hombres dedicados a esta tarea eran tan bellos, sus sonrisas tan atractivas, que parecían distintos, poderosos, estoicos. Esta era su suerte y no se quejaban”.


miércoles, 19 de octubre de 2011

CON FRUTA NATURAL LOS ESCOLARES EMPEZARAN EL DIA CON VITALIDAD

En un artículo aparecido en “La Vanguardia” del viernes 2 de septiembre de 2011, “un desayuno variado y equilibrado es imprescindible para afrontar la larga jornada escolar”. Según este mismo articulo “El desayuno más equilibrado y sano es el que se compone de frutas, lácteos y cereales. Las frutas aportan hidratos de carbono de fácil asimilación, vitaminas y fibra. Los lácteos son una fuente importante de proteínas de calidad, calcio y vitaminas básicas. Los cereales aportan energía, vitaminas, minerales y fibras.”

www.mandarinasynaranjas.es

lunes, 3 de octubre de 2011

¿QUIENES SOMOS?


Ganando terreno al mar, trabajando tierras antes pantanosas y enfrentándose a las rocas que separaban la tierra fértil de las cepas de los naranjos, nuestros antecesores, hicieron brotar en ocasiones de la arisca roca, unos huertos frondosos que proporcionan unas naranjas y mandarinas de primera calidad.



Somos unos campesinos que llevamos varias generaciones trabajando nuestros huertos y que hemos pensado en ofrecer a los consumidores naranjas recién cortadas del árbol.



Son naranjas maduradas de forma natural. Son naranjas auténticas, con sabor y jugo auténticos y que únicamente se sirven en temporada.

Se ha imaginado usted recolectar directamente la naranja desde el mismo árbol? Ahora tiene Ud. la oportunidad de poner en su mesa una naranja de verdad.



Desde esta puerta abierta al mundo que es Internet, valga nuestro reconocimiento por su esfuerzo en convertir estas tierras en fértiles, lo que proporciona hoy la posibilidad a jóvenes generaciones de acercar y ofrecer al mundo unos productos que maduran encima de los árboles, sin prisas y de forma natural, haciéndolos llegar a casa de los consumidores sin intermediarios, sin ningún tipo de tratamiento, sin ningún tipo de alteración.



Del huerto a la casa, del agricultor al cliente, del árbol a la mesa. Buen provecho!